NO MÁS POSTERGACIÓN

No sé si les pasa, pero yo muchas veces me detengo a ver la gente caminar y a descifrar sus rostros dicientes, mientras los observo pienso en qué estarán pensando, ¿por qué caminan así?, ¿por qué combinaron su atuendo de esa manera?, o ¿para dónde irán?

Cada uno de nosotros tiene un ritmo en la vida, un caminar, unos colores, un sentido, por ratos o por años vamos en cámara stop motion, felices de recibir, felices de compartir, felices de crecer, de llenarnos de ilusiones, de pensar “cuando sea grande seré…”, al llegar  a la edad adulta hemos logrado grandes triunfos y alcanzado muchos retos, pero de repente la película toma un ritmo a cámara lenta y nos hallamos allí contando los pasos, viviendo la rutina, los sueños se fueron apagando o solo ya no hacen la misma ilusión y la vida va y viene y somos transeúntes en esta monotonía y otro año más finaliza ante nuestros ojos.

Todos tenemos sueños, algunos sueñan conocer el mar, otros terminar la carrera, otros un ascenso, y alguna vez soñamos también con ser bomberos, espías o maestras, pero, ¿qué paso con ellos? ¿Dónde quedaron enterrados? ¿Por qué los hemos olvidado? ¿Por qué desertamos?

Los sueños los hemos enterrado o abandonado por heridas o malas experiencias en nuestra vida, por frustraciones, como no haber tenido dinero para pagar la universidad o la carrera soñada, habernos casado con la persona equivocada, o no haber tenido la oportunidad de desarrollar ese don que deseábamos como el canto, por ejemplo, la buena noticia es que nunca es demasiado tarde.

Toma este inicio de año como la oportunidad para desenterrar esos sueños olvidados, para identificar las causas por las que has abandonado, los gigantes y obstáculos que debes superar para alcanzarlos, planea, medita, ten fe en el plan, revisa dónde estás actualmente y cómo puedes arrancar a trabajar por ellos y a actuar, a dejar de postergar la acción.

Identifico como uno de los gigantes más comunes y prominentes por los que hemos muerto a soñar y es la postergación, me he estado preguntando qué es lo que nos pasa, porqué postergamos, porqué nos dejamos llevar por el letargo, la pereza, la falta de disciplina y hasta la falta de ilusión para ir tras nuestros sueños, y he encontrado varios aspectos que quiero compartirles.

En estos días leía que somos procrastinadores expertos por una razón, y es que creemos que somos dueños de nuestros días en la tierra y que lo que no hagamos hoy, lo podremos terminar mañana.

Vaya que cierto y que gran mentira nos hemos creído, mientras hoy  escribo esto y ustedes lo leen, alguien está descendiendo bajo tierra en su ataúd, y al mismo tiempo, todos estamos gastando segundos del tiempo que nos queda en esta tierra, porque definitiva y biológicamente estamos destinados a morir, en este instante estamos muriendo.

También encontré que postergamos porque centramos nuestra mente en el dolor que representa iniciar la acción, el dolor de levantarse más temprano, de dejar de comer empanada, de trasnochar estudiando, y pensamos en el placer, el placer de la cama cinco minuticos más, el placer de una pizza salida del horno, el placer de ir a cine en vez de estudiar, por esto es necesario re aprender, re programar nuestra mente y mostrarle como placer el alcance de una milla más en el camino a nuestro objetivo y como dolor el dejar pasar un día más en la vida pasiva y sin propósito en que hemos caído.

Por último, mucho tiene que ver con nuestra actitud, tal vez, los grandes sueños tarden en llegar, las oportunidades no sean visibles y nos encontremos en un estado de espera, pero, ¿qué estamos haciendo en este tiempo? En vez de ver el tiempo de espera como la no respuesta, como el estancamiento, como la frustración, veámoslo como la oportunidad de entrenarnos, concentrémonos en qué necesitamos o qué nos falta para alcanzar la meta y trabajemos en ello, mientras tengamos focalizados nuestros esfuerzos en lo que no tenemos, jamás le daremos el verdadero valor a lo que tenemos actualmente y no lo utilizaremos en pro del alcance de nuestras metas.

Necesitamos humildad y gratitud para valorar lo que tenemos actualmente y necesitamos buena actitud y visión para usarlo en pro del alcance de nuestros anhelos.

Las reto a retomar esos sueños postergados, o aquellos enterrados, y a reavivarlos, cultivarlos con amor, con fé, con esperanza y con disciplina, esfuerzo y duro trabajo, no más después, el momento es ahora.

Piensen en cada rol de sus vidas, mamá, hija, esposa, hermana, profesional, escritora, servidora, etc y a cada rol colóquenle una meta que sea medible, que tenga fecha, identifiquen los obstáculos o las dificultades e ingenien un plan que las pueda ayudar a lograrlas, busquen aliados para estas metas, si una meta es ir al gimnasio y no tienen quien las ayude con los niños, pueden por ejemplo empezar una rutina en casa con youtube, o pedirle a una amiga cercana que cuide los niños y se pueden turnar un día que vaya ella un día ustedes y así.

Esta época la puede usar el diablo para meter en nuestras cabezas semillas de estancamiento, de derrota, de tristeza, pero como mujeres sabias que somos, vamos a contrarrestar todas estas semillas con fé, vamos a levantar nuestro escudo de la fé y a declarar las promesas de Dios para nuestra vida, el mejor guardián de sueños es Dios, se los vamos a entregar y vamos a declarar en fé que sí podemos, que es más grande el Dios que vive en nosotras que las circunstancias, que para Dios NADA es imposible y que con su ayuda vamos a cumplir con nuestras metas, que tenemos como aliado estratégico a un Dios eterno, que cada día esta ayudándonos a labrar este camino, y en manos de un Dios eterno no podemos dudar que lo mejor esta por venir para nosotras.


Gordo y yo.. ya le dimos la vuelta al mundo en nuestros sueños... vamos a ver a dónde nos lleva este 2017!

Comentarios

Entradas populares